Aproximadamente 1,000 trabajadores de la planta de baterías para vehículos eléctricos de la empresa conjunta entre General Motors y LG Energy Solution en Spring Hill, Tennessee, recibirán aumentos salariales sustanciales tras su decisión de unirse al sindicato United Auto Workers (UAW). El reconocimiento del sindicato se produjo después de una decisión mayoritaria de los trabajadores para sindicalizarse, lo que conllevó un aumento mínimo del salario inicial de $20 a $27.72 por hora, con más aumentos esperados en los próximos tres años. Este desarrollo marca una ganancia significativa para la UAW, ya que amplía su influencia en los estados del sur, similar a los recientes esfuerzos en una planta de ensamblaje de Volkswagen en Chattanooga. La instalación de Spring Hill es la segunda planta de baterías de GM en sindicalizarse bajo el contrato nacional establecido el otoño pasado, después de un movimiento similar en Ohio.
