Los bomberos en el norte de Portugal continúan luchando contra los incendios forestales en la región de Aveiro por cuarto día consecutivo, respondiendo a las altas temperaturas que han contribuido a la crisis. Aproximadamente 4,000 bomberos y 22 aeronaves están involucrados en la lucha contra las llamas, y el gobierno ha declarado una «situación de calamidad» en los municipios afectados debido a la magnitud de la destrucción. Cuatro bomberos han perdido la vida desde el comienzo de los incendios, y el acceso a ciertas carreteras sigue siendo restringido. El gobierno portugués está trabajando para proporcionar alojamiento a quienes han sido desplazados por los incendios, mientras se espera un clima más fresco pronto.